EL DIABLO DE VISITA

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EL DIABLO DE VISITA

El Diablo ha venido a vernos, nada peligroso. Contento de su trabajo y triunfos. Se ha sentado a nuestra mesa y se ha servido vino. Vence a cada instante, no le preocupa perder el tiempo... Los hombres somos estupendos para su soledad, sólo necesitamos ser libres para pecar, la tentación está dentro de nosotros…

¿Y Dios?... ¡Ah, sí! El viejo ha dejado de luchar, como él. Los hombres ya no atienden a razones, quieren sus propios paraísos e infiernos... Bebe y bebe... No se está mal en su casa a pesar de lo que dicen. Estamos invitados, claro...

No sabemos, tenemos nuestras propias ideas para el futuro supra humano...

Sí, se lamenta, ahora se sufre sin él, igual que se goza sin el otro... Así y todo los hombres somos estupendos...