YANQUI MANIAC

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YANQUI MANIAC

El ingeniero informático Jhom J. Jake (3J), llegó a Madrid representando a una empresa de su país. Era principios de verano y hacia bastante calor.

Tras un día de trabajo muy movido se dirigió a una zona de alterne y contrató a una prostituta. Bebieron varias copas y luego se dirigieron al hotel.

Una vez allí, el americano desnudó a la mujer con cierta dosis de violencia haciendo caso omiso a las débiles quejas de esta.

La puta fue a tumbarse en la cama pero el hombre no la dejó, la retorció en el suelo como un ovillo y la penetró sin desnudarse.

Más adelante la sometió a tocamientos lascivos y le introdujo objetos por el sexo.

Como ella se resistía e incluso llegó a golpearlo en la cara, el yanqui respondió con brutalidad, a puñetazos y patadas. En un momento dado tomó una raqueta de tenis y se la introdujo en la vagina pugnando por atravesarla mientras ella chillaba y sujetaba la raqueta como podía.

3J, preso de un frenesí sexual, poseyó nuevamente a la mujer sangrante que respondía con débiles manotazos a la agresión. Hasta que él, cansado del juego le propinó un tremendo puñetazo que la dejó semiinconsciente. El yanqui entraba y salía del cuerpo de la desdichada que gemía con cada acometida.

En otro momento agarró sus gruesas tetas y tiraba de ellas como si quisiera arrancárselas. Se estremeció con solo pensarlo.

Sacó una navaja del bolsillo y comenzó a rebanarle el pecho izquierdo. La puta soltó un alarido de terror al comprender que se las veía con un loco asesino.

Y era cierto, el yanqui la apuñaló repetidas veces y luego siguió cortándole el pecho. Cuando acabó comenzó con el derecho. Una vez cortados ambos, los tomó en las manos y con ellos asidos, buscó la máxima excitación.

Luego, exhausto, enajenado por completo, cargó con el cuerpo de la mujer, lo acercó a la ventana y lo arrojó al patio de luces. Colocó las dos tetas sobre la mesilla de noche y se tendió en la cama, quedándose dormido enseguida.

Así lo encontró la policía que acudió tras la llamada de los vecinos que descubrieron el cuerpo mutilado de la mujer.