viernes, 22 de junio de 2012

LA FUNDACIÓN DE MODELO




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LA FUNDACIÓN DE MODELO

Para la Fundación de Modelo llegaron astronautas azules de las colonias exteriores enlazados a sus esposas por los tubos de respiración.

Acudieron doscientos productores de proteínas vegetales y animales animados por la propaganda de la fundación. También vinieron para quedarse, mecánicos de la Armada que exhibían sus pagas perpetuas como símbolo de futuro.

Una flotilla de contrabandistas se posó en la explanada principal donde se celebraría el acto fundacional; fueron recibidos con entusiasmo.

De la Tierra llegaron, fugitivos del bien y del mal, cien parejas con sus hijos mutantes y el semblante triste. Una caravana de vagabundos decidió detenerse en Modelo.

Mercaderes, héroes borrosos de inciertas aventuras, ladrones de cualquier cosa de valor, jugadores de fortuna, predicadores, ingenieros oscuros, deportistas profesionales, abogados, técnicos en informática, investigadores del diablo, mujeres a la caza de hombres, asesinos a sueldo, buscadores de minerales, artistas del vacío, burócratas perdidos, políticos acabados, bandas de jóvenes violentos, enfermos incurables, saboteadores y gente normal...

Una muchedumbre de hasta seismil personas se congregó a la hora aproximada.

El comité fundacional se abrió paso entre los presentes y al llegar a la coordenada propuesta se detuvieron. Colocaron un monolito industrial y encima de él un gigantesco imán con espinas matálicas. El conjunto tenia una altura de sesenta metros y las puntas de las espinas relucían en lo alto como puñales amenazadores.

Una vez que hubo sido instalado, el comité se subió a la plataforma del monolito y fue leyendo el acta Constitucional de Modelo.

-¡Hombres y mujeres libres! : Queda constituida la ciudad de Modelo, estado soberano para la creación, el comercio y el ocio. Ninguna traba pondremos para su crecimiento. Todas las personas, de cualquier clase y condición, podrán venir y quedarse en Modelo, hoy y siempre, sin límite de tiempo, y en el espacio que puedan conseguir. Y esta ley no puede ser quebrantada.

Todos dieron por válido el discurso fundacional y la ley que instauraba. Y tras la fiesta que siguió, cada uno fue a instalarse donde sus deseos o negocios le condujeron.

Así nació Modelo, ciudad estado, planeta metálico y artificial hecho por la acumulación de ingentes cantidades de chatarra. Creció soberbia y desafiante, Modelo, malhadada ciudad y estado siniestro, Babilonia disoluta y pendenciera, refugio de villanos y depredadores, más libre que ninguna otra ciudad que el hombre haya podido imaginar, horizonte de las utopías, acogedora de todos los caos, reina del cosmos vacilante, el sostén de los vicios y los deseos irrefrenables.

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